Entre sábanas

Tus dedos ya no serpentean

entre montañas de sábanas

que nos enlazan …

Tus manos ya no navegan

en el amontonado blanco

buscando cobijo caliente

que nos embriaga…

Mi cuerpo descansa

desnudo de palabras,

mi piel siente frío

pérdida y solitaria,

mientras mis brazos abrazan

donde la cabeza descansa.

Apago mi ojos al mundo

para volar en mis sueños ardientes,

donde no existe el permiso

donde el decoro se muda en gemido

y olvido que soy el convicto.

24.10.2011