No sé...

No sé, si oír
-tengo ganas de verte-
me hace volar en un mundo
que no es mío
y quizás tampoco tuyo.

La soledad es un tenue silbido
en mi oído sordo,
que reclama atención,
que sonríe sin querer
y no gasta lágrimas,
porque, no te mira y
tampoco te habla,
simplemente camina,
volando sola, contigo.

No sé, si oír
-te amo-
me acerca o me aleja,
me abruma.
Quiero oírlo cada día,
quiero sentir todos los días,
quiero mirarte simplemente,
volando sola, contigo.

Marta







Comentarios

Entradas populares